Cuando evaluamos el uso de paneles solares para una instalación, generalmente encontramos dos categorías de módulos: monocristalinos y policristalinos, los cuales dominan el 80% del mercado fotovoltaico. Aunque ambos paneles producen energía a partir de la luz solar y tienen como principal componentes el silicio, tienen diferencias que debemos conocer con el fin de elegir el adecuado.
A continuación explicamos cuál es la diferencia entre paneles solares monocristalinos y policristalinos:
La principal diferencia entre las células monocristalinas y policristalinas es su pureza. En células monocristalinas la pureza es mayor, por lo tanto el color es más oscuro que la célula policristalina. Además, las esquinas de las células policristalinas forman un ángulo recto.
Otra de las principales diferencias entre las células monocristalinas y policristalinas es el coeficiente de temperatura (%/°C). Todas las células solares tienen un coeficiente de temperatura, es decir a medida que la temperatura del módulo aumenta, la potencia generada por el panel solar disminuye. La creencia popular es que los paneles solares policristalinos tienen mejor rendimiento en lugares con alta temperatura.
Sin embargo, comparemos este coeficiente de temperatura (%/°C) de los paneles solares monocristalinos y policristalinos de los fabricantes más comunes y luego analizaremos los resultados. Empezando con el fabricante Amerisolar.
Para módulos fotovoltaicos Amerisolar, el coeficiente de temperatura nos indica que las células monocristalinas tienen menor porcentaje de pérdidas conforme aumenta la temperatura.
La anterior imagen corresponde a los coeficientes de temperatura para paneles solares Canadian Solar. Podemos notar que nuevamente las células monocristalinas tienen menos pérdidas cuando trabajan a temperaturas superiores a 25°C.
Por último, comparemos los paneles solares TRINA SOLAR .
De acuerdo a los datos expuestos, podemos concluir que los paneles solares monocristalinos son más aptos para trabajar en lugares con altas temperaturas, además la mayoría de los fabricantes han logrado la máxima potencia de sus módulos con células monocristalinas, dado que son mucho mas eficientes.
Esta nueva tecnología ha ayudado a mejorar el rendimiento y eficiencia de los paneles solares tanto monocristalinos como policristalinos.
PERC. (Passivated Emitter Rear Cell) consiste en colocar una capa reflectante para así aprovechar al máximo la radiación, es decir en el panel la última capa es reflectante devuelve hacia las primeras capas la luz o radiación no absorbidas aumentando la eficiencia total del panel.
Por tanto, los paneles monocristalino y policristalino fabricados con esta tecnología, tienen células dobles, una recibe la radiación directa de la luz solar y la otra recibe la radiación reflejada por la capa reflectante radiación que no absorbió la primera célula, esto hace una mejor eficiencia en el panel.
En los paneles monocristalinos la tecnología P.E.R.C. mejora el rendimiento y el problema relacionado con el sobrecalentamiento ya que la última capa reflectante evita que se sobrecaliente la base de aluminio con la radiación que no absorbía la célula.
Para la fabricación de este tipo de panel se usa el silicio en bloque, al cortarlo en altas temperaturas y enfriarlo artificialmente al hacer esto la célula se fragmenta deja de ser mono (es decir una), a ser poli (es decir muchos) y se forman cristales individuales. Al ser las láminas cortadas de un bloque sus bordes formaran un ángulo exacto de 90° y suelen ser de un color azul claro.
Debido a su modo de fabricación estos paneles son usados en instalaciones donde se requiera potencias medias o bajas, ya que tienen un menor rendimiento en comparación con el panel Monocristalino, aun así, el panel policristalino es idóneo para lugares cálidos ya que soporta mejor el sobrecalentamiento y tienen una mayor absorción de calor que el Monocristalino.
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